"Confianza, actitud mindfulness"

"Mientras más confianza tengamos en nosotros, más confianza tendremos en nuestras relaciones y en otras personas, y a la naturaleza, y a los retos varios de la vida, podemos en realidad residir en nuestra propia confianza, en nuestra habilidad de enfrentar lo que suceda"  Dr. Jon Kabat-Zinn


Dentro de las actitudes mindfulness hay una en particular que se siente conforme se va practicando el mindfulness, la actitud de la "confianza". Recordando a las personas que quieren conocer mindfulness y las personas que ya lo practiquen: los guías o facilitadores, somos personas que acompañamos en la práctica a los participantes y les vamos guiando, ya sea mediante una sesión en vivo, sesiones grabadas, material audiovisual etc. Como a un bebé que se le enseña el caminar, el hablar y que conforme va practicando, va tomando confianza, hasta que se suelta por si misma y por si mismo a caminar y hablar. Así se les va mostrando al participante mediante el uso del lenguaje como se realiza las diferentes formas de práctica formal (meditación) y también se les proponen prácticas de mindfulness informal para el día a día.

La invitación es a no poner a los guías y facilitadores en un pedestal, ni idealizarlos, ni siquiera ponerlos en el estatus de gurus o maestros, en el mindfulness la maestría no existe, la conciencia plena se practica de por vida como una experiencia nueva una y otra vez. Además es poner la confianza en los propios recursos del participante y no poner la confianza ciega en el guía. El camino es personal y el facilitador no lo puede recorrer por nadie.

Los facilitadores nos preparamos profesionalmente para poder guiar a las personas de la manera mas ética y profesional posible. Somos personas como todos, con situaciones, tristezas, alegrías, miedo, valentía, bondad, etc., que nos encontramos con la práctica de la atención plena y la realizamos todos los días, arraigándola en el ser y con la intención de continuar regando la semilla de la conciencia plena. Los facilitadores somos personas que durante la práctica sostenida de mindfulness escuchamos en el corazón un llamado para compartir el mindfulness con el resto del mundo y para eso le dedicamos todos los días a cultivarla, guiarla, estudiarla, pero sobre todo a practicarla.

Los facilitadores en la gran parte de los programas de mindfulness, cursos y talleres, invitamos a las personas después de ciertas semanas de práctica sostenida a intentar guiarse por si mismos, es decir, sin guías de audio, video o facilitador,  incentivando la actitud de la confianza hacia su persona y hacia la sabiduría que emana de cada persona, la cual, los va guiar durante la participación activa en la meditación.

En el grupo de mindfulness que tengo el gusto de facilitar, invito a los participantes y soy reiterativo en que los días que no nos reunimos, intenten practicar al menos durante 5 minutos sin audios, sin videos, sin el facilitador, recordándoles que la única forma de hacerlo mal es no practicar. 

Mientras haya práctica, la confianza se va fortaleciendo poco a poco y se va regando esa semilla constantemente, de modo que se da el caso, que no sólo se arraiga la confianza en la práctica del mindfulness, sino que también se extiende a la confianza en la vida diaria. De repente tienes esa confianza arraigada en el ser, que te permite no solo dirigir tu propio velero navegando en el mar de la vida, sino que te encuentras con la confianza de emprender en la vida y realizar cualquier cosa que te propongas, dándole la bienvenida a los miedos, incertidumbre etc. Para aceptarlos, dejarlos ir, transformarlos y continuar con confianza en lo que sea que la vida nos presente en el camino. 

La confianza en el mindfulness no significa una fé ciega, sino que durante la práctica, descubres los recursos que te acompañan en la vida, ya sea para refugiarte en estos cuando la situación lo requiera y para potenciarte cuando sea el caso. Mirando la vida con una atención amable y no castigadora, no enjuiciadora, ni inflexible, mirando con la mente de principiante (otra actitud mindfulness), el gran mundo de alternativas y posibilidades que hay al alcance y que se van presentando momento a momento.

A todas las personas que incluyan el mindfulness en su estilo de vida, los invito a seguir trabajando en la confianza en su ser, sus recursos, su persona, en la atención plena, siendo reiterativo que la práctica es necesaria para que la confianza siga creciendo. Sin dejar de lado que al iniciarse en el mindfulness la recomendación es encontrar un facilitador que va estar para ustedes ante cualquier duda y para escuchar sus experiencias y aportar a su guía posibles remedios para la serie de obstáculos que se presenten en el camino, y que este guía a su vez puede estar para ustedes durante el camino y para ser consultado si la persona así lo desea.

También está una gran cantidad de libros sobre mindfulness que aportan muchas enseñanzas, recordatorios e información.  Que invito a que se comience si así se desea, una vez que la atención plena ya es un hábito en la persona, para que las palabras resuenen con la práctica personal e incluso sean un motivante.

"Confianza mis queridas y queridos practicantes, su sabiduría interior los guía también, no la olviden, pero sobretodo, escúchenla en el silencio, y una manera de encontrarnos con el silencio es practicando mindfulness" medita amigo.



Correo electrónico:

meditamigomedita@gmail.com




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